Kawerau: 145 trabajadores de una fábrica de papel higiénico parados durante dos semanas sin recibir salario

May 03, 2024

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Los trabajadores han sido excluidos de la fábrica de Essity en Kawerau, un fabricante local de papel higiénico. Foto / NZME

Durante dos semanas, 145 trabajadores han sido excluidos de su lugar de trabajo en Kawerau sin recibir pago.

Y no se vislumbra un final, ya que la compañía suspendió un proyecto planificado de 15 millones de dólares mientras continúa el estancamiento en materia de empleo.

El secretario del sindicato Pulp and Paper Union Kawerau, Tane Phillips, dijo que desde el 9 de agosto había un cierre patronal en la fábrica de Essity.

Essity es una de las empresas de higiene y salud más grandes del mundo y sus marcas incluyen Purex, Sorbent, Libra y Handee, dijo el sindicato.

El 9 de agosto, el Bay of Plenty Times informó que el sindicato afirmó que el suministro de papel higiénico del país podría estar en riesgo después de que Essity despidiera indefinidamente a 145 trabajadores, quienes pidieron un ajuste por inflación como parte de las negociaciones de su convenio colectivo de trabajo.

Phillips dijo que se estaban negociando tres contratos en nombre de esos empleados.

"Si no obtienen el IPC, retrocederán", dijo en ese momento.

En declaraciones al Bay of Plenty Times esta semana, Phillips dijo que el sindicato buscaba aumentos salariales acordes con la inflación y el creciente costo de vida. El aumento del trimestre de junio del índice de precios al consumo (IPC) fue del 7,3 por ciento respecto al año anterior.

Si bien la compañía había ofrecido un pago único adicional en el primer año del contrato de tres años, dijo que los aumentos salariales en los otros dos años no coincidieron con la inflación esperada.

Dijo que la posición del sindicato se basaba en las predicciones de los analistas de un aumento total del 15 por ciento en tres años.

Phillips dijo que a pesar de las negociaciones de la semana pasada, "la empresa no está dispuesta a avanzar con el cierre patronal".

Afirmó que la empresa les estaba diciendo a los trabajadores "que no pueden regresar hasta que estén de acuerdo con las condiciones y el salario que la empresa les ha asignado".

Phillips dijo que el sindicato estaba tratando de ayudar a los trabajadores "donde podemos" con vales de comida.

Roger Coffin, que ha trabajado en la fábrica durante 22 años, es uno de los 145 trabajadores despedidos y también es delegado sindical.

"Muchas de las cosas que se han estado desarrollando en las últimas semanas no tienen precedentes. Nunca las había visto", dijo.

"Nunca nos han excluido".

Coffin dijo que era "afortunado" de tener dinero ahorrado "para un día lluvioso" y de poder vivir sin paga.

Pero le preocupan los empleados jóvenes y los nuevos o con contratos temporales que "potencialmente no habrían tenido la capacidad de ahorrar nada".

Dijo que muchos de los miembros del sindicato querían volver a trabajar.

"Pero tienen que conseguir algo mucho mejor que la oferta".

Essity afirmó que las demandas de aumento salarial del sindicato para los convenios colectivos provocarían una pérdida de inversión y amenazarían los empleos locales.

La oferta salarial de Essity fue un aumento del 3 por ciento en cada año de un acuerdo de tres años y un pago único en efectivo, haciendo que el pago del primer año equivaliera al 8,3 por ciento.

El director general de la planta de Essity en Kawerau, Peter Hockley, afirmó que la empresa tenía empleados "bien remunerados", que se encontraban entre los "trabajadores mejor pagados en la industria manufacturera de Nueva Zelanda, ganando casi el doble de los ingresos semanales medios de los neozelandeses".

"Queremos seguir ofreciendo excelentes salarios y condiciones porque es bueno para los empleados, nuestro negocio y la comunidad local. Nuestra oferta salarial mantiene condiciones atractivas, aborda los impactos de la inflación en los empleados y es más que justa y razonable".

Hockley dijo que la compañía no tenía otra opción que iniciar un cierre patronal para tratar de asegurar un acuerdo, después de 19 días de huelga y continuos reclamos salariales que amenazaban el futuro del sitio y los empleos.

Dijo que debido a las condiciones creadas por el impasse, Essity había suspendido indefinidamente un importante proyecto de mejora de la máquina de papel que contribuiría a la viabilidad y el futuro del sitio.

El proyecto de 15 millones de dólares actualizaría el proceso de secado de la máquina de papel de Essity a vapor geotérmico, ofreciendo "la primera innovación mundial".

Essity estaba tratando de minimizar las interrupciones para los clientes y se comprometió a llegar a un acuerdo que proporcionara un aumento salarial justo y razonable para los empleados y protegiera el futuro de sus operaciones de fabricación en Nueva Zelanda.

Essity no respondió directamente a los comentarios hechos por Tane Phillips y Roger Coffin.

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